Se vendieron unos seis mil contratos de trigo, diez mil de soja y cuarenta mil de maíz. La fuerte baja para el maíz encontró un sustento adicional a la baja en la mejora de la perspectiva climática, lo que permitiría un avance de la siembra. Para la soja la presión a la baja fue resultado del negativo reporte de exportaciones, es decir menores compras por parte de China y la abultada oferta sudamericana. La debilidad que mostró el dólar no logró contrarrestar el contagio a la baja que el maíz generó en la oleaginosa. El trigo fue el que perdió mayor terreno, para el fin de semana se esperan lluvias en la región del sur que vendrían a dar alivio al cultivo. Según algunos productores las lluvias estarían llegando tarde como para revertir las malas condiciones en que se encuentra el cereal, como resultado de la sequía.

En el mercado local todos los productos se contagiaron de las bajas del mercado de referencia. Por el trigo baja proteína se mantuvo el precio ofertado en U$S 200 por la descarga inmediata, el trigo nuevo ajustó a la baja y la exportación ofreció U$S 180 por la descarga diciembre/enero. Poco interés por el maíz a la espera de una ampliación en los cupos de exportación. Solo se escuchó una oferta por parte del consumo por $670 en Clason por descarga inmediata, el volumen negociado fue escaso. Por la soja las fábricas pagaron $1240 la descarga inmediata y se negociaron unas 4.000 toneladas.

Por ahora esto es todo,  buen fin de semana.

Saludos, Mariana García.